Trading Forex con CFDs

Un CFD significa "Contrato por Diferencia". 👍

Un CFD es un instrumento financiero negociable que refleja los movimientos del activo subyacente a él.



Un contrato por diferencia (CFD) es un acuerdo entre un "comprador" y un "vendedor" para intercambiar la diferencia entre el precio actual de un activo subyacente y su precio al momento de cerrar el contrato.

Lo que te permite hacer un CFD es especular sobre la posibilidad de que el PRECIO de un activo suba o baje, sin necesidad de poseer el activo real.

La lógica detrás de tradear con CFDs es sencilla.

Si el precio de un activo sube un 5%, tu CFD también subirá un 5%. Si, por otro lado, el precio baja un 5%, tu CFD perderá un 5% de su valor.

Los CFDs te permiten apostar por precios que suben o bajan sin poseer el activo subyacente y se pueden utilizar para negociar una variedad de mercados como forex, acciones, índices, materias primas y criptomonedas.

En esta lección, nos centraremos en los CFDs de forex.

Los CFDs de forex te permiten tradear sobre la fortaleza (o debilidad) de una moneda frente a otra.

El trading de CFDs implica comprar y vender contratos por diferencia ("CFDs") a través de un proveedor en línea, quienes se promocionan como "proveedores de CFDs".

Cuando tradeas en forex, un CFD consiste en un acuerdo (un "contrato") para intercambiar la diferencia en el precio de un par de divisas específico, entre el momento en que se abre el contrato y el momento en que se cierra.

Cuando se cierra el contrato, recibirás o pagarás la diferencia entre el precio de cierre y el precio de apertura del CFD.

Si la diferencia es positiva, el emisor del CFD te paga.
Si la diferencia es negativa, tú pagas al emisor del CFD.
Con los CFDs, puedes especular sobre los movimientos de precios en ambas direcciones.

"Long" (largo) y "short" (corto) en el trading de CFDs son términos que se refieren a la posición que tomas en una operación.

Puedes abrir una posición "long" (larga) o "short" (corta) con CFDs.

Entonces, al abrir un CFD, tendrás la opción de:

Comprar el CFD al precio de venta indicado ("ir largo" o "long").
Vender el CFD al precio de compra indicado ("ir corto" o "short").
La elección que hagas aquí reflejará tu opinión sobre la dirección en la que anticipas que se moverá el precio del activo subyacente.

Esto significa que:

Una posición larga implica entrar en un contrato de CFD con la expectativa de que el precio del activo subyacente AUMENTARÁ de valor. ("Apuesto a que el precio subirá desde aquí.")
Una posición corta implica entrar en un contrato de CFD con la expectativa de que el precio del activo subyacente DISMINUIRÁ de valor. ("Apuesto a que el precio bajará desde aquí.")

Para cerrar la operación, realizarás lo contrario de la operación de apertura.



En ambos casos, al cerrar tu posición de CFD, tu ganancia o pérdida es la diferencia entre el precio de cierre y el precio de apertura de tu posición de CFD.

La magnitud de la ganancia o pérdida representará esta diferencia multiplicada por el tamaño (número de unidades) de la posición que negociaste.

(Más cualquier tarifa u otros costos como cargos de interés por posiciones mantenidas durante la noche).

Como su nombre lo indica, un CFD es un contrato entre dos partes para intercambiar la diferencia en el precio de un activo subyacente, entre el momento en que se abre el contrato y el momento en que se cierra.

Si el activo sube de precio, el comprador recibe efectivo del vendedor.
Si el activo baja de precio, el vendedor paga efectivo al comprador.

Por ejemplo, si crees que GBP/JPY va a caer de precio, venderías un CFD sobre GBP/JPY. Aún intercambiarás la diferencia de precio entre la apertura y el cierre de tu posición, pero obtendrás una ganancia si GBP/JPY cae de precio y una pérdida si GBP/JPY aumenta de precio.

Los CFDs se liquidan en efectivo, pero el monto nominal nunca se intercambia físicamente. El único dinero que realmente cambia de manos es la diferencia entre el precio del activo subyacente cuando se abre el CFD y cuando se cierra el CFD.

La diferencia entre los precios de apertura y cierre de la operación se liquida en efectivo en la denominación de tu cuenta. No hay entrega de activos físicos.

Por ejemplo, al cerrar una posición de CFD que involucra EUR/USD, no se intercambian físicamente euros ni dólares.

Con los CFDs, básicamente estás apostando si el precio del activo subyacente va a subir o bajar en el futuro, en comparación con el precio cuando se abrió el contrato de CFD.

Los CFDs son conocidos como derivados "over-the-counter" (OTC) porque se negocian directamente entre dos partes en lugar de en un intercambio centralizado.

Las dos partes involucradas son TÚ y tu CORREDOR.

En lugar de comprar o vender monedas físicas, estás operando con CFDs, que es un contrato que te permite especular sobre si el precio de un par de divisas subirá o bajará.

CFDs = Derivados Apalancados
Ya hemos discutido cómo los CFDs son productos financieros en forma de derivados que permiten a los traders minoristas especular sobre los cambios en el precio de un activo, sin poseer el activo en sí, pero otra característica destacada de los CFDs es que se operan con apalancamiento, lo que proporciona ventaja financiera.

Los CFDs son derivados apalancados.

Tradear con apalancamiento significa que puedes abrir una posición de gran tamaño sin tener que desembolsar el monto completo.

Digamos que deseas abrir una posición en GBP/USD equivalente a un lote estándar (100,000 unidades). Sin apalancamiento, tendrías que pagar el costo total por adelantado. Pero con un producto apalancado como un CFD, es posible que solo tengas que aportar el 3% del costo (o incluso menos).

Esto significa que puedes abrir una posición en CFDs depositando solo un pequeño porcentaje del valor total de la posición como depósito ("margen").

La cantidad de dinero necesaria para abrir y mantener una posición apalancada se llama "margen" y representa una fracción del valor o tamaño total de la posición.



Cuando tradeas con CFDs, existen dos tipos de margen.

El margen inicial es el depósito inicial necesario para abrir una posición.

El margen de mantenimiento es el margen adicional que se requiere si tu posición está cerca de incurrir en pérdidas que el margen inicial (y cualquier fondo adicional en tu cuenta) no podrá cubrir.

Si no cumples con el requisito de margen de tu operación, recibirás una llamada de margen por parte del proveedor de CFDs solicitándote que deposites más fondos en tu cuenta. Si no lo haces, la posición se cerrará automáticamente y se realizarán las pérdidas incurridas.

Esto se conoce como "tradear con margen".



Por ejemplo, para un contrato de CFD con un ratio de apalancamiento de 50:1, que implica un requisito de margen del 2%, solo tendrías que depositar un margen inicial de $200 para obtener una exposición de $10,000 en EUR/USD.

Estás efectivamente "tomando prestado" el otro 98% del valor del CFD.

Las ganancias o pérdidas se basan en cambios en el valor del tamaño total de la posición (o "valor nominal").

Esto significa que aunque solo pagues una fracción del valor nominal total de tu posición de CFD, tienes derecho a las mismas ganancias y pérdidas como si hubieras pagado el 100% del valor nominal total.

Por ejemplo, si el valor total de tu posición inicial en una operación de CFD es de £10,000 y el ratio de apalancamiento ofrecido por una firma es de 100:1, el requisito de margen inicial para ti sería del 1% de £10,000, por lo que necesitarías depositar £100.

Un movimiento del mercado del 0.5% en contra de tu posición, originalmente valorada en £10,000, resultaría en una pérdida del 50% (£50) sobre el margen depositado.

La naturaleza apalancada de los CFDs significa que los traders minoristas pueden estar expuestos a pérdidas que exceden los fondos depositados. Dependiendo del apalancamiento utilizado y de la volatilidad del activo subyacente, la velocidad y el volumen de las pérdidas pueden ser significativos.

Comúnmente vemos ratios de apalancamiento de hasta 500:1 para CFDs de forex. Con un ratio de apalancamiento de 500:1, un trader minorista puede abrir una posición de CFD por valor de $1,000,000 con un depósito inicial (requisito de margen) de solo $2,000.

Estos ratios de apalancamiento tan altos hacen que los CFDs sean especialmente sensibles al precio. En mercados de movimiento rápido, los precios pueden saltar y las pérdidas pueden exceder el depósito inicial.



Muchos traders minoristas pueden (y lo hacen) terminar con un saldo negativo en su cuenta. Esto significa que pueden perder todo su dinero y deber más dinero a su proveedor de CFDs.

El apalancamiento es lo que hace que el trading de forex sea atractivo porque permite a los traders abrir posiciones más grandes de lo que podrían permitirse con su propio dinero, lo que aumenta el potencial de obtener grandes ganancias.

En resumen
Los nuevos traders pueden preguntarse cómo es posible que los traders de forex compren o vendan monedas que no poseen.

También suelen confundirse con el concepto de vender algo antes de comprarlo.

La clave de la respuesta radica en que el trader está operando un derivado, no las propias monedas.

Como tú y tu broker de forex están intercambiando acuerdos entre ustedes en lugar de los activos subyacentes reales, no es necesario "poseer" nada antes de vender.

Estos derivados se llaman "contratos por diferencias" o "CFDs".

Un derivado es un instrumento financiero cuyo precio depende de o se deriva de las fluctuaciones de precios de un activo subyacente.

Un CFD es un contrato en el cual dos partes acuerdan intercambiar la diferencia de precio entre el precio de apertura y el precio de cierre del contrato.

Al tradear con CFDs, estás apostando efectivamente si el precio del activo subyacente subirá o bajará en el futuro, en comparación con el precio cuando se abrió el contrato CFD.

Cuanto más se mueva el precio del activo en la dirección que has predicho, más ganarás. Pero cuanto más se mueva en contra tuya, más perderás.

Puedes abrir un CFD poniendo solo un pequeño porcentaje del valor del trade. Esto se conoce como "trading apalancado" o "trading con margen".

En los Estados Unidos, dado que los CFDs están prohibidos, los traders minoristas de forex operan un producto ligeramente diferente llamado "contratos FX continuos" o "contratos FX al contado continuos".

Pero ambos productos básicamente operan forex de la misma manera. Tomate, tomata. 🍅

En el argot de la industria, juntos se conocen como "contratos retail FX/CFD".

Los brokers de forex crean estos derivados, "CFDs" o "contratos FX continuos", para los traders minoristas.

Dado que los traders minoristas no pueden acceder ni tradear en el mercado FX al contado, esta es la única forma en que podemos especular solo sobre los precios de los pares de divisas (o "tradear en el mercado forex").